domingo, 31 de agosto de 2014

Escribí lo quieras

Así le dejé la página en blanco con la más temible de las consignas, aquella soledad del día plano sin atractivos ni anuncios interesantes que podrían ser un rescatito. Arisco y pesado como está últimamente comenzó a desgano y después dar mil vueltas, también un poco fastidiado comenzó a llenar de palabras la hoja sin renglones de mi cuaderno azul araña. Escribió hasta que la luz del día lo levantó de la cama. Cuando lo leí, para mi sorpresa, mi cuerpo escribió en chino. Una vez más me había dejado afuera.

Malhaya mi suerte

Cae la tarde sobre mi patio de pasto crecido.
La penumbra arropa al tilo mutilado, al fresno amputado y al pino verde que no preocupaba al bueno de mi vecino.
La brisa un poco más fresca obliga a cerrar las ventanas, a correr las ya desteñidas cortinas.
El silencio se impregna con el olor inolvidable del anochecer de un día domingo.
La casa entera se agazapa para esperar el futuro.
Ay, no puedo clarinear
el mañana será para todos mejor.

domingo, 24 de agosto de 2014

No me puedo escribir

Borroneada, tachada, corregida me hallo esta mañana.Mi cuerpo-cuaderno ya no es una hoja en blanco, pero se resiste mojado, cascoteado, zamarreado, tenaz en su respuesta de no querer abrir los ojos ni pispear la claridad retardada por la tormenta. Tendremos batalla me digo cuando me siento y bajo los pies al piso de baldosas rojas. Hoy me toca escribir con las venas,el domingo de la roca hace su entrada triunfal.

miércoles, 20 de agosto de 2014

La visita

Sus mañanas de los días de semana, de esos días ordinarios que todos los días vive, tienen un único afán más allá o más acá de las tareas domésticas que cada jornada emprende con valentía y esperanza, sí,  llegar a la otra orilla por eso rema que te rema...hasta que escucha la llave añorada por las horas y su voz saludando desde la puerta.Así por un ratito recupera el escenario soñado y se sienta a conversar con la recién llegada, cosa del cielo parece. Cuando se marcha inventa alguna compra para caminar tomada de su brazo una cuadra más.

viernes, 15 de agosto de 2014

Otra salida

Antes de la vigilia recorrió con su compañero de mapas ilusorios los amplios, luminosos y despoblados cuartos de la casa paterna, cartografía de tan anhelada que ya era nostalgia demorada. Se detuvo en los retratos empotrados, sombras de quienes ya se fueron avisando con holgura que partirían, nadie lo hizo de improviso aunque cuando lo hicieron, en las habitaciones atronó el espanto del último día. No encontraron los familiares muebles, ni muchos roperos de este tiempo, solo en las paredes se atesoraba la vida de los habitantes antiguos, enormes vitrinas custodiaban las piezas...Salió al patio para darse de lleno con grupos de personas dispuestas como almácigos alrededor de una ollita de cobre calentada  sobre un brasero semi enterrado en el suelo rectangular. Había tiempo y las palabras caían y caían casi derramadas por el frío amanecer.Despertó adivinando los pasos del cuerpo que estaba a su lado mientras escucha ese susurro diciendo hay que soltar la esperanza como una ola quemante.

jueves, 14 de agosto de 2014

La voz

 Sonó en las entretelas de su corazón, la voz casi susurrada para cobijar la otra voz áspera, casi rota por el polvo alucinado de los rostros, necesitó escucharla con el cuerpo entero dos veces, en una no cabía tanta fidelidad al mensaje com-partido. Entonces se dijo, quedó mejor así, suena a la pura voz del corazón desnudo. En la sencilla hoja de cuaderno aparecía su letra de siempre que tampoco quería ser otra.

sábado, 9 de agosto de 2014

Fiesta aniversario

Amaneció con una niña entre las piernas a quien tenía que cortarle y coserle un vestido_ justo a ella que en costura hacía la o con un vaso_ a su lado una adolescente lloraba sin pausa señalándole una herida cosida como matambre  mientras musitaba cómo seguimos, más atrás un joven hablaba muy dolido con algunos mayores preguntándole y ahora qué, cuando recuperó la cordura se dijo, claro, hoy es la fiesta del 25 aniversario del colegio.

Mutación cromosómica

Llegaron al consultorio media hora antes del turno para registrarse.La la atención venía demorada como la mayoría de las tardes anteriores de los meses de los dos años que participaban de esta ceremonia. Los rostros algunos conocidos, el infaltable pañuelo, gorra, gorrito, turbante más o menos colorido, la bolsa azul intenso del laboratorio de rigor, el bastón, la silla de ruedas o el brazo del compañero, los estudios indicados y la mirada cómplice en los rostros.Comenzaba el disciplinamiento con el que eran recibidos, el aprendizaje de ser pacientes, tarea mucho antes iniciada y trabajosamente asumida; y a veces penosamente transitada. Reconocieron, como desde hacía tiempo también a un colega de trabajo,hoy desentendido casi desconocido. Ella asombrada cuando su nombre apareció en pantalla debajo del de Rubén, le dijo para sus adentros, vos y yo tenemos el mismo tipo de cáncer, por vos conocí a mi amor, qué rara suena la musiquita, ¿no?  

Carta abierta

Carta abierta a la comunidad escolar del Instituto Giovanni Pascoli de José C. Paz, con motivo de sus
25 años de trayectoria pedagógica

   Con fragmentos de realidad tejimos una historia de diferentes o iguales, de los unos con los otros y así vivimos un nosotros que nos permitía cada día bajar del cerro para aprender a ser plenamente humanos.
   Con cambios y luchas trajinamos cada hora de clase para brindar formas de enseñanza que mejoraran la situación de cada estudiante superando sus condiciones adversas o de insuficiencia crónica.
   No compensábamos los déficits de la falta de... ni considerábamos a los adolescentes como sistemas insuficientes, sencillamente trabajamos por su emponderamiento para lograr aprendizajes potentes y relevantes.
   Absorbidos, ignorados,
pulverizados, engarzados
en estas márgenes difusas
transcurrían nuestras jornadas, cooperando y aprendiendo todos juntos, porque juntos somos más inteligentes.
   Otra no puedo ser
                       y todavía estoy bajando del cerro.
                                                       Abrazo esperanzado.

                                                                                          Directora fundadora










 

jueves, 7 de agosto de 2014

La lección

_¿ Y tu maestro, qué sintió?, la voz afónica le preguntó, con algo mezcla de dolor y de cansancio
_ Ser la última basura, reconoció con su voz delgada y última.
_ Entonces, no te quejes, apoyáte en tus hermanas y ponéte de pie otra vez, ni de perfil ni de costado, de frente como sos, ni grande ni primera, sino pequeña y débil.
    Se colocó el alba y salió a predicar el reino, ése que vendrá pero ya está en el corazón de cada uno y de cada otro.En ese rincón del mundo se volvió signo de reparación y emblema de fidelidad.

Un puñado de basura

Está en un agujero y no puede salir. Solo es un puñado de basura, justo ahí donde cayó su corazón cuando lo tiró por la ventana. Me voy, chau corazón, te dejo, más no podés doler.Piso las telitas de tu alma, hoy no puedo romper tu límite, perdí,corazón asesino, quedé sin aliento y justo hoy me niego a levantar la bandera blanca.Dan ganas de patearte sin asco y mandarte a la cucha.Así se va, antes busca una cuchara para terminar de vaciar su pecho despoblado.Ya es del bando de los vencidos.

miércoles, 6 de agosto de 2014

Esta casa

Cansada y sucia por la lucha de la vida cotidiana, ésa que parece el último subsuelo del día, y con hambre,
no espera ni banquetes, ni castillos. Se acostumbra quizás a ver solo las zonas enfermas y ya no combate solo al polvo, lo hace suyo porque ella también no sabe por dónde, pero siempre entra igual que el polvo.
Quizás sea por eso su anhelo sea llegar a esta piedra y poder sentarse,  
y su ruego sea no abandonarse a la dureza de esta vida.